¿Cuánto nos cuesta vivir?
Día tras día, asumimos compromisos financieros: pago de deudas, servicios, alimentación, transporte y otros gastos recurrentes. En medio de este ritmo, pocas veces nos detenemos a reflexionar: ¿cuánto cuesta realmente el estilo de vida que llevamos?
Desde Asociación Cibao, te compartimos algunos consejos clave para ayudarte a entender tu situación financiera actual y planificar con mayor conciencia.
Conoce tu ingreso disponible
El primer paso para calcular tu costo de vida es identificar cuánto dinero realmente tienes disponible cada mes. Aquí es importante distinguir entre salario nominal (el total antes de descuentos) e ingreso neto (lo que realmente recibes).
Recuerda: tu salario nominal puede verse reducido por aportes obligatorios como ARS (seguro de salud), AFP (pensiones), ISR (impuestos) u otros descuentos aplicables. Por eso, planifica tus finanzas a partir del ingreso neto, que es lo que realmente puedes usar para cubrir tus compromisos.
Haz un presupuesto mensual
Un presupuesto no solo es una herramienta de control, es la base de tu estabilidad financiera. Te permite saber con claridad en qué estás gastando, cuánto puedes ahorrar y si te estás endeudando más de lo recomendable.
Al elaborar tu presupuesto, asegúrate de incluir:
Ingresos disponibles
Ahorros programados
Gastos recurrentes
Compromisos financieros (deudas)
Prioriza el ahorro como filosofía de vida
El ahorro no es solo una meta, es un hábito clave para tu bienestar futuro. Aunque al principio el monto sea pequeño, lo importante es la constancia. Piensa en el ahorro como un pago que te haces a ti mismo.
Reserva una parte fija de tu ingreso cada mes para eventualidades, proyectos personales o metas a mediano y largo plazo.
Evalúa tus gastos generales
Diversos estudios coinciden en que los gastos mensuales representan hasta el 70% de los ingresos de una persona promedio. Por eso, es fundamental contar con un plan de gastos.
Este plan te ayudará a identificar:
Ingresos disponibles
En qué renglones se concentra tu dinero (alimentación, transporte, vivienda, educación, etc.)
Cuáles gastos puedes reducir o eliminar
Dónde puedes reasignar recursos hacia objetivos más importantes
5. Analiza tus deudas y compras a crédito
Las deudas también forman parte del costo de vida. Muchas compras de alto valor —como electrodomésticos, vehículos o viviendas— se hacen con financiamiento. Por eso, debes ser estratégico al planificar tus compras.
Una compra efectiva es aquella que responde a una necesidad real, que se ajusta a tu capacidad de pago y cuyo financiamiento no compromete tu estabilidad. Evalúa siempre el costo total de lo que adquieres a crédito, incluyendo intereses y comisiones.
Reflexión final
Saber cuánto te cuesta vivir no se trata de hacer cuentas complicadas, sino de mirar con objetividad tus ingresos, tus gastos, tus deudas y tus decisiones de consumo. Solo así podrás tomar mejores decisiones financieras y acercarte a una vida más tranquila, organizada y con propósito.